La alargada sombra de Kilian Jornet en la Altitoy-Ternua.
Lo ha vuelto a hacer. Una más para él. Esta vez con nuevo compañero, pero con la misma sonrisa volvía a cruzar las líneas de meta. Kilian Jornet sumó un nuevo triunfo a su gran palmarés en el esquí de montaña. Una semana después de colgarse las tres medallas en los Campeonatos de Europa, se alzó con el triunfo en la Altitoy-Ternua, la prueba del circuito Grande Course que se celebra en los Pirineos (Occitania).
Jornet, que esta vez cambiaba a Jakob Hermann por su gran amigo Matheo Jacquemod, como pareja de baile en la Altitoy-Ternua sumaba su segundo triunfo, después de la lograda en 2016. Han sido los más rápidos durante dos días. Todos los demás, por detrás. Si el sábado ganaban con un tiempo de 2 horas 28 minutos y 10 segundos en Baregés, el domingo sumaban otro triunfo en Luz Ardiden con 1 hora 59 minutos y 4 segundos. Por detrás, subían al pódium las parejas formadas por Xavier Gachet y William Bon Mardion (4;30,17) y Boscacci y Maguet (4;31,26). Los pareja de vascos más rápida de esta edición, fue la formada por los jóvenes Iñigo Martínez de Albornoz y Pablo Oderiz, con un gran 13. puesto.
En categoría femenina, los dos días se repitió la misma historia. El mismo guión durante las dos jornadas. En la suma de los dos días, las italianas Alba de Silvestro y Katia Tomatis (5h29:39) se subieron a lo más alto del pódium con clara diferencia sobre la pareja formada por la la suiza Jennifer Fietcher y la francesa Axelle Mollaret (5h40:01). El tercer lugar, lo ocuparon las catalanas Marta García y Mireia Miró (5h47:27). Nuestra mejor representante en la categoría femenina, fue la vizcaína Nahia Quincoces, que junto a Marta Riba se hacía con un gran 5. puesto.
Pero la Altitoy-Ternua no vive solo de los más rápidos. Durante todo el fin de semana, todos los esquiadores populares que se dieron cita en Luz Saint Sauver, dieron un color especial a la gran cita del 2018.