Por Sechu López, alpinista y friend de Ternua 

Cuando vamos a la montaña a realizar alguna de nuestras actividades favoritas, a muchos también nos gusta hacer fotografías, recuerdo de las actividades realizadas, de quienes nos acompañan y de los lugares visitados, donde el contraste de luces y el imponente paisaje son fantásticos. Generalmente hacemos fotografía de momntaña sin mayores pretensiones, pero con la ilusión de captar momentos mágicos e irrepetibles, de hacer “la foto” que merezca ser enmarcada o publicada. Además, compartir nuestras buenas fotos es muy satisfactorio.

Equipo fotográfico:

  •  Descartando los móviles como cámara principal, tenemos las cámaras compactas y las de objetivos intercambiables, siendo estas últimas las que nos ofrecen más calidad y prestaciones. El sensor de la cámara marcará la diferencia y con buenos objetivos (lentes) obtendremos imágenes más nítidass
  • La mejor cámara del mundo no es la mejor para nosotros aunque podamos pagarla,si por peso, volumen o miedo a estropearla la dejamos en casa. Elegir una cámara con visor y de relación calidad/tamaño/robustez adecuada a nuestra actividad principal, siendo deseable que cámara y objetivos estén sellados contra humedad y polvo.
  • Antes de nada configurar la cámara correctamente y sácale el máximo partido consultando su manual, conociendo de antemano cómo acceder a sus funciones, ya que cuando estemos en la montaña pasando frío o en una situación comprometida, no será el mejor momento para averiguar, por ejemplo, cómo se pone el autodisparador para hacernos una foto en la cumbre. Configurar fecha y hora (ajustar al cambiar de país) facilitará el posterior archivo de las imágenes. Elige guardar las imágenes a la máxima calidad posible.
  • Captar el instante es esencial, por lo que llevaremos nuestra cámara a mano, pero si hay riesgo de que agua (humedad, lluvia, nieve...), temperaturas extremas o golpes (condiciones frecuentes cuando hablamos de fotografía de montaña), debemos llevarla resguardada en un buen estuche, evitando meterla en la mochila para no perdernos fotos. En caso de muy bajas temperaturas, guardar la cámara bajo la ropa tiene el inconveniente de nuestra humedad y que, al sacarla para fotografiar, las lentes se empañen por la diferencia de temperatura; las baterías de repuesto sí debemos llevarlas al abrigo de nuestro cuerpo (en bolsillo interior), y no deberían faltar nunca (al menos una) en nuestro equipo.
  • En la fotografía de montaña es importante asegurar la cámara, con mosquetón y cordino, a la parte superior de la mochila, así no acabará en el suelo por un descuido.
  • Llevar varias tarjetas de memoria.
  • Accesorios útiles: Trípode, filtros polarizador y degradado de densidad neutra (y más aconsejable el degradado soft o suave).

 

Técnica:

  • Usar la regla de los tercios para destacar el punto de interés de la imagen. Combinar planos generales y detalles, paisajes y retratos... ser creativos, no limitarse a hacer fotos típicas. En los viajes capta también el entorno, gentes y costumbres, cultura... enriquecerán la colección de imágenes e ilustrarán mejor la “historia” de tu aventura.
  • Elegir una buena luz. La mejor y de resultados más espectaculares es al amanecer y al atardecer porque la luz difusa es más agradable; también es muy buena los días de tormenta.
  • Controlar la luz. En las montañas es frecuente tener unas partes totalmente a la sombra y otras muy brillantes como las cumbres nevadas o el cielo. Esto significa pérdida de detalle en las sombras o zonas sobreexpuestas (demasiado luminosas), debido a que la mayoría de las cámaras tienen un bajo rango dinámico (¡a tener en cuenta al elegir una nueva!). Ayuda usar un filtro degradado de densidad neutra.Dar profundidad a los paisajes, incluyendo algún elemento en un plano cercano, como un compañero, una roca o una planta, así las montañas del “fondo” adquieren mayor relevancia. Coloca los elementos esenciales de la foto (p.ej. las personas que dimensionan el paisaje) en la unión de los tercios. No descuides el cielo, es un elemento predominante; las nubes suelen ayudar a dar realismo a la escena.
  • Hacer la foto. Si haces las fotos siempre en modo automático no esperes grandes resultados. Utilizando programas de la cámara: nieve, noche, deporte, macro... la ayudas a decidir en función de la situación.

 

Últimas recomendaciones para fotografía de montaña

  • El filtro UV es necesario, más aún en la fotografía de montaña.
  • No descuidar el equipamiento de montaña, si estás pasando frío probablemente no hagas fotos.
  • Experimenta otros modos de control del obturador:

a) Prioridad a la velocidad: por ejemplo usa bajas velocidades para poder captar más luz al anochecer (usa trípode) y altas para detener el        movimiento de un esquiador b) Prioridad a la apertura: cerrando el diafragma hasta f/11 o f/16 (no más para evitar pérdida de nitidez por difracción) para ganar profundidad de campo en los paisajes (que todos los planos salgan nítidos) o lo contrario, por ejemplo en retratos.

  • Recuerda que configurando bien la cámara, usando las reglas de la composición y la luz adecuada, se obtienen mejores resultados.
  • Presta mayor atención en situaciones arriesgadas, tu seguridad es mucho más importante que una buena foto.

Ah, y cuando vuelvas a casa descarga las fotos y haz una copia ¡no sea que pierdas todo el trabajo por un descuido!